Grace Potter es una magnífica exponente de las artistas que con el nuevo siglo perduran las esencias de la música con raíces norteamericana para desenvolverse con naturalidad y gusto en el rock, country, blues o soul. Avezada multinstrumentista, poderosa voz e indudable atractivo escénico hacen de esta nativa de Vermont una de las más interesantes propuestas actuales.
Me encanta ver el desolador panorama que todos los cierres de año plantean esos listados que pretenden seleccionar lo mejor de la cosecha musical recolectada durante el susodicho ejercicio.